Invertir los ahorros para ser un poco más rico

Uno de los principios básicos para conseguir la libertad financiera es procurar sacar provecho a todo lo que ingresas y logras ahorrar. No tiene sentido dejar el dinero por debajo del colchón. Tienes que buscar formas de invertir tus ahorros en función de tus objetivos a corto, medio y largo plazo.

El dinero durmiente pierde valor

¿Sabes lo que es la inflación? Es un fenómeno que hace que cada año las cosas sean más caras. Para medirlas, todos los países han establecido unas cestas comparativas. En España el indicador de crecimiento de la inflación es el IPC, publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas cada mes. Si tienes tu dinero en una cuenta no remunerada, debajo del colchón o en cualquier otro elemento que no genere intereses en realidad esta perdiendo valor. Para simplificar, si la inflación es del 2% anual y tienes un dinero sin rentabilidad, al cabo de 10 años habrá perdido casi un 20% de su valor para comprar bienes y servicios.

¿Qué inversión te conviene?

Tienes que analizar tu perfil de riesgo. Si necesitas tener el dinero disponible para emergencias y no quieres arriesgar, puedes optar por depósitos a plazos cortos. Si prefieres apostar por la bolsa, entiendes como funciona y estás dispuesto a asumir los riesgos, también puede ser una buena opción. Las posibilidades son casi infinitas, desde comprar bonos del Tesoro, ser socio en una empresa, o cualquier otra compra de activos (inmobiliario, metales preciosos).

No te fíes de los chollos

Hay una norma bastante cierta en el caso de las inversiones: la rentabilidad es proporcional al riesgo. Es lógico, cuanto más arriesgada sea una propuesta de inversión, más el que pone el dinero va a pedir intereses altos, para que le compense en caso de que pueda perder lo invertido.

Por lo tanto, cuando algunas personas o instituciones sin escrúpulos (incluidos algunos bancos tradicionales) prometen altas rentabilidades con un riesgo mínimo, están mintiendo. O la rentabilidad no será tan alta, o el riesgo no es tan bajo. Si los mejores depósitos ofrecen un tipo de interés del 3%, no tiene sentido que alguien nos ofrezca el doble o el triple por nuestra cara bonita.